Para eso existen los divorcios
Andrés Manuel López Obrador tiene agarrado del pescuezo al PRI, que con un líder vapuleado y disminuido se ha convertido en el rival más débil de la escena nacional.
Ni la escritora Yolanda Vargas Dulché hubiera concebido un melodrama tan fantástico como el que enfrentan el PRI y el PAN por la dichosa iniciativa de reforma al artículo quinto transitorio de la reforma de la Guardia Nacional, aprobada en 2019.
El quinto malo, que proponen los tricolores extienda el plazo para la presencia de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad pública hasta 2028, es la manzana de la discordia.
El PAN amagó a su amasio el PRI con: es ‘Va por México’ o las Fuerzas Armadas; el tricolor en voz de Rubén Moreira: “estamos votando por México”. Vamos, ¡pónganse de acuerdo!
A todo esto, el inquilino de palacio se frota las manos con la idea de un divorcio entre sus opositores.
Viejos, rancios e “ingenuos” los lideres de los partidos opositores le están haciendo el caldo gordo a la narrativa de López Obrador en contra de Va por México.
De entrada, no tienen candidato fuerte para la presidencial de 2024 y con esto van derechito y sin escalas al fracaso electoral.
Decían ¡hay tiro! Y si lo hay… pero en la variopinta coalición Va por México.