Oaxaca comenzó ayer su segunda semana en semáforo epidémico en color naranja (alto riesgo de contagio) con 43.3 de ocupación hospitalaria de poco más de 250 pacientes con complicaciones por COVID-19, la cifra más alta de los ocho días.
A pesar de que el Hospital Regional de Alta Especialidad anunció el lunes pasado que suspendió por ese día los nuevos ingresos porque llegó al tope de su capacidad, ayer reportó un 92 por ciento de ocupación con 25 pacientes.
El Hospital General Doctor Aurelio Valdivieso incrementó su ocupación en su área COVID-19 al 125 por ciento y el Hospital Regional Presidente Juárez del ISSSTE inició ayer su segunda semana continua de operar con saturación de pacientes en su área COVID-19.
Ayer la ocupación de ese nosocomio se elevó al 132.5 por ciento.Su director, Jesús Gonzalo López Cruz, confirmó que su capacidad es para 24 pacientes y ayer tenían 30, lo que obliga a habilitar su área de cirugía para atención de pacientes de COVID-19.
“La idea es brindarles el espacio a los derechohabientes porque en los últimos cuatro días hemos estado en una crisis tremenda. El Hospital Regional (de Alta Especialidad de Oaxaca) no nos está recibiendo pacientes, a veces uno nos admiten en el de la Mujer (y el Niño Oaxaqueño) o en el IMSS, pero ha sido bastante difícil, por eso México proporcionó recursos para contratar personal”, detalló.
El inicio de la pandemia obligó a la mayoría de hospitales a reconvertir un área y disponer de camas para pacientes COVID-19. Incluyendo los nosocomios privados, Oaxaca dispone de alrededor de 620 camas.
En el Hospital Regional del ISSSTE se arrancó con 13 camas para pacientes de COVID-19 y tras adecuaciones en el área de urgencias se amplió a 36, pero sólo pudo operar con 24 por falta de persona.
A la par se reconvirtió el área de pediatría, obstetricia y cirugía; es ésta última la que ahora van a utilizar con 12 camas más para pacientes adultos estables, en recuperación o que no requieran intubación; con la contratación de personal eventual debe operar a partir de este martes.
“No porque vamos a ampliar la gente no se debe cuidar, debe de extremar precauciones, es triste ver que para entrar a tiendas departamentales haya un colón, eso es sinónimo de contagios, nos estamos preparando para el repunte de enero”, ya que advirtió que ese mes del próximo año, junto con febrero “significarán los más críticos”.