OAXACA, México (EA) — La refinería Dos Bocas, situada en el puerto del mismo nombre, en el estado de Tabasco, representa uno de los proyectos más ambiciosos y controvertidos de los últimos años en México. Concebida por el presidente André Manuel López Obrador para transformar la industria energética nacional y disminuir la dependencia del petróleo extranjero, esta refinería ha enfrenta numerosos retos desde su inicio.
De acuerdo con El Financiero, a “más de cinco años, la refinería de Dos Bocas sigue sin alcanzar su plena operatividad”. En tanto que, su costo superó recientemente los 20 mil millones de dólares, lo que la convierte en uno de los proyectos más costosos que han surgido en el país.
Un Proyecto de Alta Inversión y Altas Expectativas
Iniciada durante la administración del expresidente Andrés Manuel López Obrador, Dos Bocas fue diseñada para convertirse en la refinería más grande del país. La obra ha implicado una inversión que supera los 20 mil millones de dólares, más del doble del presupuesto original de 8 mil millones. A pesar de la inauguración oficial en 2022, la planta aún no ha alcanzado su plena operatividad, pues según el rotativo está procesando combustibles al 17.5 por ciento de su capacidad a fines de diciembre, de acuerdo con datos de la compañía compilados por Bloomberg.
Retos Técnicos y Financieros
El proyecto ha enfrentado desafíos técnicos significativos, incluyendo problemas de diseño y construcción en un terreno complicado. Además, Pemex, la empresa estatal de petróleo y gas, sigue lidiando con una deuda de casi 100 mil millones de dólares, lo que añade presión para que Dos Bocas comience a producir combustible a escala comercial cuanto antes.
La Promesa de la Autosuficiencia
La presidenta Claudia Sheinbaum ha reiterado su compromiso de hacer de México un país autosuficiente en términos energéticos. El objetivo es que Dos Bocas procese 340 mil barriles de crudo por día, produciendo 170 mil barriles de gasolina y 120 mil barriles de diésel. Sin embargo, expertos y analistas se muestran escépticos sobre si la refinería alcanzará estas metas ambiciosas.
Impacto Internacional y Comercial
La situación se complica con la reciente política del presidente estadounidense Donald Trump de imponer un arancel del 25% a las importaciones mexicanas, incluido el petróleo crudo. Esto obliga a México a buscar nuevos socios comerciales para exportar su crudo y reimportar combustibles terminados. Mercados como Taiwán, India, Corea del Sur y España se presentan como alternativas viables.
Futuro de Dos Bocas
Con su tecnología anticuada y los continuos problemas operativos, Dos Bocas enfrenta un camino desafiante hacia la plena operatividad. Sin embargo, el éxito de este proyecto es crucial para la visión de autosuficiencia energética de México y para revitalizar la industria refinadora del país. La conclusión de este proyecto podría significar una transformación significativa para la economía y la infraestructura energética nacional.