La Comisión Federal de Electricidad (CFE) mantiene abandonada la construcción de una granja solar que inició hace dos años en Oaxaca.
El proyecto, en el que se invertirían 45 millones de pesos, abastecería de energía eléctrica a la localidad de Santa María del Mar.
Hasta ahora, la obra está paralizada, la comunidad no cuenta con el servicio prometido y los 20 pobladores que fueron contratados para iniciar la construcción, no recibieron salario.
Los habitantes de esta región del Istmo de Oaxaca exigen a la empresa que termine el proyecto o demuestre la aplicación y el destino de los recursos públicos que estaban programados para la misma.
Aunque en los primeros trabajos la CFE utilizó hasta el cable abandonado hace 10 años, cuando se intentó instalar la planta, la obra no se terminó.
“No tienen un estudio de suelo. Colocaron la malla perimetral y los postes que van a sostener las celdas solares sobre terreno arenoso.
¡Levantaron los cimientos en la arena! El suelo ha erosionado, y lo hemos informado a la CFE, pero no hacen caso”, explicó Efraín Solano, asesor de los pobladores de Santa María del Mar.
“La obra estaba planeada para que concluyera en marzo o abril de 2020, pero reconocemos que estuvo detenida porque, quienes se oponen a la energía eólica, nos impidieron pasar las celdas a Santa María. Tras negociaciones de unos 10 meses, por fin dejaron pasar los materiales”, explicó.
Tras la suspensión, las obras reiniciaron en agosto pasado, pero a seis meses el proyecto tiene un avance de apenas el 30 por ciento y ahora luce n el abandono, reprochó Solano.
“Y mientras, seguimos sin luz, desde hace 10 años no hay luz en esa localidad”, reprochó el activista.
Santa María del Mar se localiza en la barra que divide el Golfo de Tehuantepec y la Laguna Inferior.
Un conflicto agrario dividió a Santa María del Mar del municipio de San Mateo del Mar, el cual, desde hace ocho años, decidió cerrarle el paso por tierra.
Además le cortó la energía eléctrica y obligó a sus 900 habitantes a atravesar por lancha el Golfo, para conectarse con la tierra.
Aunque el tema agrario ya fue resuelto, el encono entre los pueblos persiste. Los gobiernos de Ulises Ruiz, de Gabino Cué, y ahora el de Alejandro Murat, no han logrado conciliar a las comunidades.