El alto comisionado para los Derechos Humanos, Volker Turk, afirmó que “toda entrega de restos mortales debe cumplir la prohibición de tratos crueles, inhumanos o degradantes” y garantizar el respeto de los fallecidos y sus familias.
Los terroristas de Hamas exhibieron los ataúdes en un escenario rodeado de mensajes propagandísticos y milicianos armados. Uno de los carteles mostraba ataúdes cubiertos con banderas israelíes junto al mensaje: “El retorno de la guerra = El retorno de tus prisioneros en ataúdes”.
El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) también repudió el acto, recordando que cualquier trato degradante en la liberación de rehenes es inaceptable. La ministra de Exteriores de Alemania, Annalena Baerbock, calificó las imágenes de “casi insoportables”, mientras que la embajada británica en Israel señaló que este hecho es un recordatorio del terror infligido por Hamas el 7 de octubre.
Israel confirmó que los restos entregados corresponden a Shiri Bibas, sus hijos Ariel y Kfir, y a Oded Lifshitz, secuestrados durante el ataque del 7 de octubre de 2023, en el que murieron 1.211 personas, en su mayoría civiles.
Los cuerpos fueron trasladados a Israel escoltados por la Cruz Roja y posteriormente enviados al Instituto Nacional de Medicina Forense en Tel Aviv para su identificación.
Mientras tanto, Hamas anunció la liberación de seis rehenes en los próximos días, incluidos Omer Wenkert, Omer Shem Tov, Eliya Cohen y Tal Shoham, secuestrados el 7 de octubre, junto con Avera Mengistu y Hisham al-Sayed, retenidos en Gaza desde hace más de una década.
Las negociaciones para nuevos intercambios de rehenes y prisioneros continúan, con la comunidad internacional presionando por un acuerdo humanitario que garantice la protección de los civiles y el respeto al derecho internacional.
(Con información de Reuters y EFE)