OAXACA, México — Maestros de la Sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) iniciaron el jueves una serie de movilizaciones en Oaxaca, bloqueando oficinas gubernamentales y casetas de peaje, como parte de un paro laboral de 48 horas que dejó sin clases a más de 800,000 estudiantes de nivel básico.
Desde las primeras horas del día, los docentes tomaron las instalaciones del Servicio de Administración Tributaria (SAT) en la calle García Vigíl, en el corazón de la capital oaxaqueña. Allí, instalaron casas de campaña con la intención de permanecer hasta las 5 de la tarde, afectando las operaciones del recinto.
Simultáneamente, los manifestantes se apostaron en puntos estratégicos de las autopistas del estado. En las casetas de peaje de Barranca Larga-Ventanilla, Mitla-Tehuantepec y Huitzo, levantaron las plumas para permitir el paso libre de los automovilistas, interrumpiendo el cobro habitual y generando caos en el tránsito. También ocuparon oficinas de la Secretaría del Bienestar en la entidad, ampliando su presencia en instalaciones públicas.
En paralelo, un grupo de maestros de la misma sección extendió las protestas a la Ciudad de México, donde se concentraron frente a la Cámara de Diputados federal para visibilizar sus demandas. Las movilizaciones, que combinan bloqueos físicos y presión política, buscan respuestas del gobierno a sus planteamientos laborales y educativos.
El paro, que marca el primer día de acciones de este tipo en 2025, afecta directamente a miles de familias oaxaqueñas, cuyos hijos quedaron sin acceso a la educación básica. La Sección 22, conocida por su historial de lucha sindical, mantiene su estrategia de ocupar espacios clave para negociar con las autoridades.
Las protestas han generado reacciones mixtas. Mientras algunos automovilistas celebran el paso libre en las casetas, otros expresan frustración por las interrupciones en servicios públicos y la falta de clases.
Las movilizaciones continuarán al menos hasta el viernes, según lo anunciado por los líderes de la CNTE, quienes no descartan intensificar sus medidas si no obtienen respuestas satisfactorias. Por ahora, Oaxaca permanece expectante ante el impacto de esta jornada de lucha magisterial.