“El gobierno deberá velar por que las instalaciones nucleares de la central […] sean aceptadas como propiedad federal”, recoge el decreto, publicado días antes de una posible visita a Rusia del director general del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA), Rafael Grossi.
La central nuclear de Zaporiyia,ocupada por los rusos, produce normalmente más de una cuarta parte de la electricidad de Ucrania y sigue teniendo una importancia crítica para el sistema energético del país, además de garantizar importantes ingresos por la exportación de electricidad.
La mayor central nuclear de Europa, que se ha convertido en el centro de la atención mundial debido a los riesgos de un accidente nuclear, consta de seis reactores con 1 gigavatio de capacidad cada uno.
27 % de la producción total de electricidad en Ucrania
Así, su proporción en la capacidad total de las cuatro centrales nucleares ucranianas es del 45 % y su contribución equivale aproximadamente al 27 % de la producción total de electricidad en Ucrania, explica a Efe Volodímir Omelchenko, jefe de programas energéticos del laboratorio de ideas “Razumkov Center”.
“Rusia ha estado creando deliberadamente inestabilidad en torno a la central en un intento de forzar al mundo a disminuir su apoyo a Ucrania por el miedo a la catástrofe nuclear”, dice. Como aparentemente no ha logrado este fin, Rusia sigue esperando conseguir sus objetivos mínimos.
“Ha estado tratando de desconectar la planta de la red eléctrica ucraniana y crear la infraestructura necesaria para utilizar la planta para suministrar electricidad a la red eléctrica rusa y a la Crimea anexionada”, indica. Varios expertos ucranianos, incluido Omelchenko, no creen que Rusia lo consiga.
Aparte de las dificultades técnicas y de los combates persistentes en la zona, Ucrania ha demostrado su capacidad para dañar la infraestructura necesaria para el transporte de electricidad desde la central nuclear a Crimea.
Apropiación ilegal de Zaporiyia pone a Ucrania ante graves problemas
El 16 de agosto, una importante subestación de transformación explotó en Dzhankoy, en la península anexionada.
La central también suministra electricidad a gran parte del sur de Ucrania ocupado por Rusia, lo que podría frenar al Kremlin de hacerla inoperativa por completo. Sin embargo, desde que Rusia ocupó la central el 4 de marzo, su producción ha ido disminuyendo.
La central dejó de producir electricidad brevemente el 26 de agosto, después de que todas las líneas eléctricas que la conectaban a la red eléctrica ucraniana resultaran dañadas debido al bombardeo de la zona que la rodea.
Si bien las necesidades de electricidad en Ucrania se han reducido en un 35 % desde el inicio de la invasión rusa, hasta los 10-11 gigavatios, debido a la destrucción de la industria y a la emigración, la central de Zaporiyia sigue siendo muy importante para la capacidad del país de capear el próximo invierno en dos sentidos.
La apropiación ilegal de esta central nuclear empeora el panorama energético de Ucrania.
*Este texto fue escrito y publicado por Deutsche Welle.