* A pesar del hermetismo por complicidad de los Presidentes y responsables de Seguridad Pública Municipal, trascendieron dos asesinatos en separos de las Policías Municipales, que no deben quedar impunes.
* Jaime Hernández Oliva, guatemalteco, murió en los separos de la Policía Municipal de Santa María Huatulco, y Abigail Hay Urrutia en Salina Cruz. Ambos detenidos solamente por supuestas faltas administrativas.
No es un fenómeno sociopolítico nuevo en los municipios, pero malamente, de manera lenta e inexorable, se ha ido normalizando y, de hecho, aceptando la ineficacia e ineficiencia en general.
La caquistocracia, el gobierno de los peores, por ser los menos capaces y capacitados, inicia o termina, en los Municipios, y se hace extensivo a los gobiernos de los estados y a la federación.
Es un asunto de seguridad nacional porque dinamita la célula básica de la división territorial, de la organización política y administrativa de nuestro régimen de gobierno, no tan democrático.
Y no es democrático porque, no se respeta a plenitud la división de poderes establecidos en la Constitución General de la República y menos las leyes y los estatutos electorales de los Partidos.
Para nadie es desconocida la imposición de familiares, amigos, compadres, socios, novias, novios, amantes, todos cómplices, en la selección de los candidatos a cargos de representación popular.
Es creciente la ineptitud por improvisación en los Ayuntamientos provenientes del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), en los Municipios electos por el régimen de Partidos Políticos.
Esta aberración sociopolítica, afortunadamente, no se da tanto en los 417 Municipios que se rigen por Sistemas Normativos como en los 153 Municipios electos por el régimen de la partidocracia.
Esta lamentable situación de la cual son fundamentalmente responsables los propios Partidos Políticos ha traído consigo de forma cada vez más evidente, pública y notoria graves problemas.
El rosario de dificultades se refleja, sobre todo, en la creciente escandalosa corrupción y, lo peor, en probables asesinatos por los jefes y elementos de las Policías Municipales en sus separos.
Es de condenar que la Fiscalía General del Estado y su titular Arturo de Jesús Peimbert Calvo no han sabido estar a la altura de su responsabilidad y no cumplen con su obligación con la justicia.
Una y otro se ven obligados a actuar por presión de las víctimas o sus familias en los medios de comunicación y especialmente en las benditas redes sociales o movilizaciones sociales.
Así ha ocurrido y ocurrió en el asesinato de Abigail Hay Urrutia en los separos de la Policía Municipal de Salina Cruz al negarse a investigar con perspectiva de género como feminicidio.
La mayoría de Morena en la LXV Legislatura del Congreso del Estado no interviene en los problemas municipales, a pesar de estar obligados a ellos, por el contrario, protegen a sus correligionarios.
A pesar del hermetismo por complicidad de los Presidentes y responsables de Seguridad Pública Municipal, finalmente han trascendido dos asesinatos en los separos de las Policías Municipales.
Jaime Hernández Oliva murió en los separos de la Policía Municipal de Santa María Huatulco, y Abigail Hay Urrutia en Salina Cruz. Ambos detenidos por supuestas faltas administrativas.
Jaime, detenido el pasado 11 de agosto por la policía municipal de Santa María Huatulco, también por una falta administrativa; extrañamente falleció horas después por un golpe en la cabeza.
El asunto no es menor, ya que de enero de 2020 y a la fecha de 2022, la DDHPO ha documentado ocho muertes ocurridas en cárceles municipales o durante la detención de las personas.
La Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO) advierte que los espacios de detención de los municipios “son zonas de alto riesgo y violaciones a los derechos humanos”.
Durante el periodo comprendido en los últimos dos años, la DDHPO ha recibido 474 quejas por abuso policial en toda la entidad oaxaqueña. Es de lamentar que la mayoría siguen impunes.
La familia de Abigail rechazó tajantemente en las benditas redes sociales que la joven madre de dos niños, se suicidara con su ropa interior en los separos de la Policía Municipal de Salina Cruz.
José Luis Hay y Hay, padre de Abigail, denunció que Abigail fue golpeada por policías municipales y luego dolosamente pretendieron hacer creer que se ahorcó con su ropa interior. ¡Imagínense!
“Yo solo quiero justicia, porque los policías de Salina Cruz mataron a golpes a mi hija y después la ahorcaron, pero ya estaba muerta. A mí me hicieron creer que se ahorcó con sus calzones, pero no lo creí.
Por un momento entré en shock, pero cuando reaccioné me di cuenta que me mintieron, quieren hacer que me enfrente a la pareja de mi hija para echarle la culpa y que la policía se desligue de su culpabilidad, pero no, los policías la asesinaron”, denunció el padre de Abigail en Facebook.
Dado que en el gobierno que concluye han ocurrido 608 feminicidios, organizaciones feministas exigieron justicia y exigieron una investigación de feminicidio con perspectiva de género.
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