ROMA (EA) — El Papa Francisco fue ingresado al Policlínico Gemelli de Roma el 14 de febrero, debido a complicaciones relacionadas con la bronquitis que le aqueja desde hace una semana. Según el Vaticano, el pontífice de 88 años necesitaba pruebas diagnósticas urgentes y tratamiento hospitalario continuo.
Desde el diagnóstico de bronquitis el jueves pasado, el Papa ha seguido con sus audiencias diarias en su suite del Vaticano. Asistió a su audiencia general semanal el miércoles y presidió una misa al aire libre el domingo, aunque delegó sus discursos en un asistente debido a dificultades respiratorias.
El viernes, el Papa apareció hinchado y pálido en las audiencias antes de su hospitalización, indicando posible retención de líquidos por la medicación. Francisco, quien perdió parte de un pulmón en su juventud, ha enfrentado problemas de salud recurrentes, especialmente bronquitis aguda en invierno. Utiliza silla de ruedas, andador o bastón para moverse y recientemente sufrió dos caídas.
El Papa ingresó al mismo hospital donde fue operado en junio de 2023 para extirpar tejido cicatricial intestinal y reparar una hernia abdominal. Meses antes, estuvo internado tres días para recibir antibióticos intravenosos por una infección respiratoria.
El Vaticano informó que Francisco ingresó después de sus reuniones del viernes, que incluyeron al primer ministro de Eslovaquia y al director de CNN. El anuncio contrasta con la confusión durante su hospitalización de 2023, inicialmente reportada como pruebas programadas. Más tarde, el Papa reveló que sufrió dolor en el pecho y fue ingresado de urgencia por bronquitis, recibiendo antibióticos intravenosos y bromeando a su salida con que “seguía vivo”.
En julio de 2021, el Papa pasó 10 días en el mismo hospital tras una cirugía intestinal. Atribuyó su recuperación a una enfermera personal que insistió en la revisión del problema. En su autobiografía “Esperanza”, recuerda una experiencia similar en su juventud, salvado por una monja italiana que duplicó su medicación, lo que permitió su lenta recuperación.
El Vaticano no ha detallado la duración de esta hospitalización ni los cambios en la agenda del Papa, quien tenía programados varios actos para el fin de semana, incluido un evento en honor a los artistas.