La bancada de Morena en el Senado aprobó ayer la creación del Padrón Nacional de Usuarios de Telefonía Móvil (Panaut), mediante el cual las personas deberán proporcionar datos personales y biométricos. Quien no lo haga, se quedará sin servicio.
Con apenas 54 votos a favor, 49 en contra y 12 abstenciones de legisladores morenistas como Ifigenia Martínez, Napoleón Gómez Urrutia y Nestora Salgado, la polémica iniciativa obligará a los clientes de telefonía a otorgar información como nombre, domicilio y número de teléfono, además de proporcionar huellas dactilares y del iris.
Sin posibilidad de negociación, los concesionarios podrán dejar sin servicio de teléfono e internet móvil a los usuarios que no proporcionen sus datos.
Se estima que en el País hay 126 millones de líneas móviles. Los usuarios con líneas preexistentes tendrían hasta dos años para dar sus datos, y en el caso de nuevas líneas, seis meses.
La iniciativa, presentada el año pasado por Mario Delgado, presidente de Morena, plantea un padrón para enfrentar y prevenir delitos como secuestros o extorsiones mediante el uso de celulares.
Las bancadas del PAN, PRD, PRI y MC alegaron que el registro de los datos es inconstitucional y violatorio de los derechos humanos, y anunciaron que impugnarán ante la Corte.
“La cara, la huella digital, el iris son datos que no puedes cambiar y que, una vez comprometidos, pueden representar afectaciones irreversibles para la persona”, alertó Luis Fernando García, director de Red en Defensa de los Derechos Digitales.
El INAI advirtió que la medida podría poner en riesgo la seguridad de los usuarios, ya que en la recolección de datos participarán muchos operadores de telefonía.