- En una carambola de cuatro bandas, el gobernador Salomón Jara impuso a Nino Toledo como candidato a senador de mayoría por la primera fórmula, aceptó a Susana Harp, dobló a Benjamín y evitó que el Verde postule candidato a senador por la primera minoría.
- Ante la mezquindad de la desmedida ambición por agandallarse las candidaturas, organizaciones de la sociedad civil, nacionales y locales, llamaron al PAN, PRI, PRD a coaligarse en candidaturas municipales.
La vorágine del alud de acontecimientos políticos en el actual proceso electoral desborda la imaginación y saca lo peor de las miserias humanas, la ambición de la mano de la traición a convicciones y partidos.
Ante la mezquindad de la desmedida ambición por agandallarse las candidaturas, organizaciones de la sociedad civil, nacionales y locales, llamaron al PAN, PRI, PRD a coaligarse en candidaturas municipales.
Exhortaron a Marko Cortés y Perla Woolrich; Alejandro Moreno y Javier Casique; a Jesús Zambrano y Tomás Basaldú; a actuar con visión, sensibilidad y, sobre todo, amor a México al peligrar la democracia.
Frente Cívico Nacional, México Unido, Red Nacional de Mujeres Chingonas, Conciencia Social y Política, Consejo Ciudadano X Oaxaca y Movimiento Social Ciudadano Unidos por Oaxaca, hacen el llamado.
“Es obligación de los mexicanos y de los dirigentes de la coalición nacional #FuerzaYCorazónXMéxico defender y preservar el Estado de Derecho y las libertades consagradas en la Constitución federal”.
En una hábil carambola política de cuatro bandas, el gobernador Salomón Jara postuló a su amigo y compañero de lucha Nino Toledo Morales como candidato a senador de mayoría por la primera fórmula.
Al mismo tiempo, se mostró respetuoso de la obligación legal de impulsar la paridad de género y aceptó la postulación de su ex contendiente, la senadora Susana Harp Iturribarría, en la segunda fórmula.
Asimismo, el mandatario estatal logró doblar a su enemigo Ángel Benjamín Robles Montoya, de quien no olvida sus grillas, intrigas palaciegas y traiciones durante el gobierno de Gabino Cué Monteagudo.
Quizás con expedientes penales por probables actos de corrupción, el ex vicegobernador de la primera alternancia en la gobernación de Oaxaca aceptó ser candidato a senador por la primera minoría por el PT.
Como parte de los misterios de la política, no solo fue desplazado Ángel Benjamín Robles Montoya de la candidatura a senador de mayoría por la primera fórmula, sino que desplazó a Lenin López Nelio.
La genial carambola política de cuatro bandas de Jara cerró la jugada con el trueque de tres diputaciones federales al Partido Verde a cambio de que no postule candidato a senador por la primera minoría.
Los grandes ganones son, como siempre, Samuel Gurrión Matías por San Pedro Mixtepec, Gabriela Pérez López por Etla y el dirigente estatal del Verde, José Antonio Estefan junior por el Istmo de Tehuantepec.
Donde también se cuecen habas es en el disminuido Partido Revolucionario Institucional (PRI) en donde el ex secretario general del CDE, Marco Cuevas, insiste en traicionar a su jefe y amigo. Pero esa es otra historia.
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