TEL AVIV, Israel.- Decenas de solicitantes de asilo en Tel Aviv formaron fila el martes para recibir su primera dosis de la vacuna contra el COVID-19 como parte de una iniciativa de la ciudad para inmunizar a los residentes extranjeros.
El ayuntamiento de Tel Aviv y el Centro Médico Sourasky empezaron a vacunar gratuitamente a los extranjeros de la ciudad, muchos de los cuales son solicitantes de asilo indocumentados.
En su primer día de operaciones, el centro de vacunación en el sur de la ciudad, donde reside una gran comunidad migrante, inyectó a decenas de extranjeros que se formaron frente al edificio. Había carteles informativos en inglés, tigriña, ruso y árabe. Entre los vacunados había trabajadores de Filipinas, Moldova y Nigeria, así como solicitantes de asilo sudaneses y eritreos.
Eytan Schwartz, un vocero municipal, dijo que el gobierno tenía la responsabilidad de “vacunar a todos dentro de las fronteras de la nación” y que el paso siguiente sería empezar a “vacuna a los solicitantes de asilo ilegales o indocumentados”.
Israel ha acelerado la inmunización desde fines de diciembre. A partir de la semana pasada hay vacunas disponibles para todos los ciudadanos mayores de 16 años.
Hasta ahora ha aplicado más de 3,5 millones de primeras dosis de la vacuna de Pfizer y al menos 2,1 millones de segundas dosis. También ha enviado miles de dosis a la Autoridad Palestina para los trabajadores sanitarios.
El domingo, Israel empezó a mitigar algunas restricciones que regían desde hace más de un mes.
La tasa de infección sigue siendo alta. El país ha registrado más de 700.000 casos de coronavirus desde el inicio de la pandemia y 5.192 personas han muerto, según cifras del Ministerio de Salud publicadas el martes.
Con información de AP