Oaxaca de Juárez, Oaxaca. – Un grupo de paramilitares y activistas de la organización Movimiento Unificador de Lucha Triqui (MULT) junto con las diputadas federales del partido Morena Beatriz Pérez y Emilia Cruz, cerraron la carretera a Tierra Blanca impidiendo el avance de la caravana de desplazados que retornaba a sus comunidades de origen acompañados de elementos de la Guardia Nacional, la policía estatal y visitadores de derechos humanos.
El grupo, con una cadena y una lona, además de gritos, se plantó en la carretera y encaró a los funcionarios estatales y federales que acompañaban a las primeras 140 familias de desplazados.
A bordo de autobuses, la caravana había avanzado de la ciudad de Oaxaca el lunes 26 de julio a Santiago Juxtlahuaca luego de una mesa de trabajo con autoridades estatales y federales y habían llegado a la comunidad de Yosoyuxi Copala este miércoles, hasta que fue detenido su avance en el acceso a Tierra Blanca, Copala, por la protesta de activistas del MULT, organizados por la diputada federal Emilia Cruz.
Simultáneamente en la ciudad de Oaxaca, el líder del MULT, ex líder de la sección 22 de la CNTE y ex activista de la desaparecida Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) Rogelio Pensamientos, se manifestó cerrando la carretera Oaxaca – Puerto Ángel frente a la sede del cuartel de la policía estatal para reprochar el retorno masivo de los desplazados.
Ante la falta de acuerdos y la presencia de gente armada en la zona, la caravana de desplazados decidió retornar a la comunidad de Yoxoyuxi, donde espera la conclusión de una mesa de acuerdos con el grupo inconforme con el regreso de los desplazados.
Rogelio Pensamientos, líder del MULT, amenazó que, si los desplazados regresan a Tierra Blanca, se rompería el pacto de paz y volvería la violencia en la zona.
“La decisión si regresan o no los desplazados a Tierra Blanca la tienen que determinar los pueblos, y no el gobierno federal o estatal”, sentenció.
Pensamientos, se opuso a que se instale una base de operaciones mixtas de la Guardia Nacional y de la Policía Estatal en Tierra Blanca, aclarando que la seguridad quedará al mando de la policía municipal.
Dijo que, por acuerdo de asamblea de Tierra Blanca, el regreso de las 140 familias tiene que ser en etapas; se permitirá el regreso de 5 familias por semana.
Precisó que, deberán ser grupos de familias de 3 a 5 integrantes, para que crucen el cerco 15 personas por día, hasta llegar a 60 familias por mes.
Aclaró que las familias que no regresarán a la localidad, son las que cuyos familiares estén implicados en asesinatos de líderes del MULT, o de otros hechos de violencia cometidos en la zona como saqueos o agresiones físicas, porque la asamblea de Tierra Blanca ya determinó su destierro y no habrá vuelta de hoja en este tema hasta que haya justicia y castigo.
Le demandaron al gobierno federal y estatal no intervenir, ni apantallar a la gente con armas.
Ante los incidentes, el secretario general Francisco García López, llamó a la prudencia y tolerancia a la organización MULT para garantizar la seguridad de los desplazados.
Mientras tanto, el titular de la Secretaría de Seguridad Pública Heliódoro Díaz Escarraga, sostuvo la postura de diálogo y disposición para alcanzar un acuerdo de paz entre las familias de la comunidad de Tierra Blanca, y así garantizar el regreso seguro y en orden de los desplazados a su pueblo natal.
“No deben existir pretextos, ni obstáculos cuando del bienestar de las familias se trata, por lo tanto, expresamos que seguiremos en mesa de trabajo con el objetivo de cumplir con el retorno seguro de las familias desplazadas a su lugar de origen; además de llevar a cabo operativos de vigilancia y seguridad en la zona, sobre todo en las inmediaciones de la comunidad de Tierra Blanca, para garantizar la sana convivencia entre las familias, con la presencia de la Policía Estatal y la Guardia Nacional”, informó.
Díaz Escarraga, insistió en el llamado fraterno a la comunidad de Tierra Blanca para que se ponga fin a este conflicto; que los desacuerdos ideológicos y políticos no sean causantes de pérdidas humanas y que no se transgredan los derechos humanos elementales.