Un helicóptero que participaba en las labores de extinción de un incendio forestal en Portugal calló al río Duero este viernes. La Guardia Nacional Republicana (GNR), cuerpo al que pertenecen los desaparecidos, dijo a la agencia portuguesa Lusa que se encontraron dos cuerpos sin vida en la aeronave sumergida en el agua y que continúa la búsqueda de los otros tres soldados. La GNR explicó en un comunicado previo que el piloto sufrió heridas leves.
El capitán del Puerto del Duero, Rui Silva Lampreia, explicó en declaraciones a periodistas que fueron encontrados los cuerpos de dos de los militares dentro del helicóptero sumergido en el río. La aeronave calló al río Duero a las 12:50 horas, cerca de la localidad de Samodães, en Lamego, con seis pasajeros: el piloto, que fue rescatado por una embarcación recreativa, y un equipo de cinco militares de la unidad de emergencias que regresaban de apagar un incendio en el municipio de Baião, en el distrito de Oporto.
La Autoridad Nacional de Emergencias y Protección Civil (ANEPC) indicó que envió “inmediatamente” equipos de socorro al lugar. Según la ANEPC, en el lugar se encuentran 122 efectivos operativos, 39 vehículos y tres medios aéreos. En las últimas informaciones oficiales, la GNR afirmó que las búsquedas en el río se llevan a cabo utilizando recursos marítimos de la policía marítima, bomberos, buzos, embarcaciones de recreo y personal militar. También dijo que por el momento desconocen las causas del accidente.
Las autoridades señalaron también que las causas del accidente están bajo investigación y no confirmaron las informaciones de medios locales que aseguraban que el helicóptero se enganchó en unos cables de alta tensión. El presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa, y el primer ministro, Luís Montenegro, se desplazaron al lugar del accidente.
Por Agencias.