Ciudad de México. – La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) presentó ante la Fiscalía General de la República (FGR), una sexta denuncia en contra del ex director de Petróleos Mexicanos (PEMEX) Emilio Lozoya Austin, 11 personas físicas y 33 personas morales, por los probables delitos de corrupción política y lavado de dinero.
La UIF identificó un esquema de lavado de dinero al interior de la petrolera,
de 2012 a 2016, por medio de contratos otorgados a 34 empresas vinculadas con Odebrecht, por cantidades millonarias, para favorecer a servidores públicos mexicanos y posiblemente financiar campañas políticas.
De acuerdo con la investigación, las operaciones se integraron en tres niveles, en el primer segmento las empresas fungieron como receptoras de los recursos públicos erogados por Pemex y organismos gubernamentales de forma injustificada.
El comunicado destaca que las personas morales guardan relación directa con Odebrecht, por medio de diversos vínculos corporativos, financieros y/o comerciales.
Entre estas, la UIF apunta a una empresa de Odebrecht que durante la administración de Lozoya Austin registró, de 2014 a 2016, transferencias por más de tres mil millones de pesos supuestamente por concepto de pagos por la prestación del servicio de “construcción” a favor del gobierno federal; no obstante, dichos servicios no fueron prestados, por lo que presumiblemente fue parte de la mecánica de las operaciones.
En el segundo plano, las empresas recibieron los recursos del primer grupo y se encargaron de transaccionarlos y estratificarlos mediante un esquema de triangulación, para luego enviarlos a empresas que se encargaron de difuminar los rastros de los activos ilícitos mediante la dispersión.
Estos movimientos consistieron en el retiro masivo de efectivo en zonas donde se realizaron comicios electorales, como en Tamaulipas, Veracruz, Hidalgo y Ciudad de México, esta última pudiera estar relacionada con los pagos derivados de sobornos a favor de Lozoya Austin.