Los desilusionados demócratas se encaminaban este miércoles a extender por dos años su control en la Cámara de Representantes, pero con una mayoría potencialmente reducida, luego de perder al menos siete escaños y que no consiguieron arrebatarles ninguno a los republicanos, al conocerse los resultados iniciales.
Para la media mañana del miércoles, las únicas ganancias de los demócratas eran dos asientos de Carolina del Norte dejados vacantes tras una nueva demarcación de distritos ordenada por la corte que los hizo más demócratas. Aunque el partido parecía tener asegurado retener la mayoría, sus resultados en las elecciones fueron una súbita decepción, luego de expectativas de ganar quizás 15 escaños.
Tras décadas de intentarlo, los republicanos vencieron al representante Collin Peterson en un distrito rural de Minnesota que respaldó a Donald Trump en el 2016 por un margen de 31 puntos porcentuales, el mayor logrado por el presidente en cualquier distrito en poder de los demócrata.
El representante, quien preside la Comisión de Agricultura de la cámara baja, se opuso al juicio político de Trump y es uno de los demócratas más conservadores en la legislatura. Fue derrotado por la republicana Michelle Fischbach, que fue vicegobernadora.
En Iowa, la representante estatal republicana Ashley Hinson derrotó a la demócrata Abby Finkenauer en una dura contienda por el escaño del noreste del estado.
También perdieron los representantes demócratas novicios Debbie Mucarsel-Powell y Donna Shalala, que fue secretaria de salud en el gobierno de Bill Clinton, en distritos adyacentes en el sur de Florida donde Trump pareció consolidar el respaldo entre los cubano-estadounidenses.
Otros derrotados fueron los demócratas Joe Cunningham en Carolina del Sur, Xochitl Torres Small en Nuevo México y Kendra Horn en Oklahoma, que tuvieron victorias sorpresivas en el 2018 en distritos en los que Trump ganó ampliamente en el 2016.
Antes de que se contasen los votos, los operarios de ambos partidos dijeron que los republicanos serían afortunados si limitaban las ganancias demócratas a un solo dígito.
Los demócratas controlan la cámara baja con 232 asientos frente a los 197 en poder de los republicanos, con cinco escaños abiertos y uno independiente. Son necesarias 218 bancas para alcanzar la mayoría.
Una mayoría demócrata menor hará más difícil para la presidenta de la cámara Nancy Pelosi unificar a sus legisladores en momentos en que un puñado de novatos progresistas arriban al nuevo Congreso de la unión americana.
Con información de AP