Hoy conmemoramos doscientos once años del inicio de la Independencia de México, una de las grandes mentiras de la historia de nuestro país y que los libros de texto, sobre todo los adoctrinantes libros de texto de esta transformación de cuarta, siguen difundiendo.
La Independencia de nuestro país, generó la Independencia de varias naciones en Latinoamérica y la conmemoran 11 años, 11 meses y 11 días después de iniciada en una curiosa casualidad de la cuáles muy pocos ciudadanos están enterados.
Dice la reseña histórica del Gobierno Federal: “el periodo de nuestra historia conocido como la Guerra de Independencia, empieza la madrugada del 16 de septiembre de 1810, cuando el padre Miguel Hidalgo y Costilla da el Grito de Dolores y termina el 27 de septiembre de 1821 con la entrada triunfal del Ejército Trigarante encabezado por Agustín de Iturbide y Vicente Guerrero, a una jubilosa Ciudad de México. El objetivo principal de este movimiento armado y social, era liberar a nuestro territorio del yugo español y que, en cada rincón de la Colonia, se olvidase por completo el concepto de virreinato”.
¿Cuál fue el “Grito de Dolores” ?, eso no lo especifica la reseña histórica del Gobierno Federal, porque en verdad no fue un grito libertario, ni uno de emancipación de las comunidades indígenas azotadas por la Iglesia Católica y el orden establecido, el Grito de Dolores del Cura Hidalgo fue ¡VIVA FELIPE SEGUNDO, REY DE ESPAÑA!
Y es que la historia y menos la reseña histórica de este gobierno de cuarta, no aborda el entorno, ni el contexto en el que se da la llamada “Guerra de Independencia” que tal vez si buscaba la independencia, no de México sobre España, sino de los bienes en México (demasiado oro y plata) de la Corona Española, amenazada a su vez por Napoleón Bonaparte, -el corso, no el que mandó a Maximiliano de Habsburgo unos años después a México- que estaba a punto de invadirla allá en la Península Ibérica.
El “padre de la Patria”, tampoco fue un héroe. Sabedor de que la lucha en México para proteger los tesoros de la Corona podría traerle inmensos beneficios personales, sobre todo llevando como estandarte la imagen de la virgen de Guadalupe para “nacionalizar” la fe católica y levantar a los indígenas con la venia de la Iglesia, se hacía llamar “Su Alteza Serenísima” para mostrar su status quo en el caso del triunfo de la Guerra.
Muchas mentiras en nuestra historia mexicana y sin embargo somos producto de todas esas etapas de nuestra historia, desde la Conquista, hasta la Revolución hemos sido una nación a la que le cuesta entender su identidad tan diversa y tan vasta, por eso Octavio Paz en su excelso ensayo “El Laberinto de la Soledad”, nos retrata de pies a cabeza y nos identifica literalmente como “los hijos de la chingada” que realmente somos.
Me parece que por eso causa tanta indignación a los mexicanos, que don López haya invitado a Miguel Díaz-Canel, dictador cubano heredero de la tiranía fundada por Fidel Castro Ruz en 1959 y presidente de la Isla, a la conmemoración de los 211 años del inicio de la Gesta Independiente de México.
Trajo a nuestro país y justamente a esa conmemoración, a un mandatario que representa a una de las dictaduras más largas de todos los tiempos, que lleva 62 años sojuzgando a los isleños y los ha llevado a los peores estatus de pobreza en el mundo, al grado que millones de cubanos han tenido que exiliarse de Cuba para vivir en otras partes donde tienen más libertades.
Díaz-Canel llega a México en medio de una crisis interna en Cuba, donde los ciudadanos piden su salida porque, a pesar de presumir grandes avances en medicina, la gente se está muriendo no solo por la pandemia, sino también de hambre.
Nuestro “presidente”, así en minúsculas y entre comillas, ha contribuido con miles de toneladas de ayuda en comida, en combustibles y medicinas, incluidas vacunas contra la pandemia que ha enviado a la Isla, no para apoyar a los cubanos, sino a su gobierno, para que un potencial golpe de estado de los ciudadanos cansados de tantas injusticias y carencias, se rebelen contra el gobierno de Miguel Díaz-Canel; tanta ayuda humanitaria -que no le sobra a México- fue enviada a Cuba para salvar el régimen tirano y represor de Cuba.
Y si lo que conmemoramos hoy, son los 211 años de libertad ¿qué mensaje le manda amlo al mundo al traer aquí a un miembro de la oligarquía cubana que lleva 62 años en el poder con resultados catastróficos?, ¿qué pensarán los gringos, nuestros importantísimos socios comerciales con quienes firmamos el T-Mec y que mantienen un embargo económico al régimen tirano de los Castro, ahora que vean en las imágenes de televisión al dictador cubano?
Me parece que las señales no son nada halagüeñas, ni para los cubanos radicados en México, ni para los radicados en Estados Unidos, ni para los mexicanos ni para ninguna nación que se jacte de ser libre, don López se está prestando a hacer una apología de la opresión.
¡Una disculpa a todos los cubanos de parte del pueblo bueno y sabio de México!
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