“Pensaron que nadie iba a ir y salieron 13 millones”: Sheinbaum presume participación en elección judicial
La presidenta Claudia Sheinbaum aseguró que la jornada de votación judicial fue un éxito, pese a las críticas previas. Según sus cifras, alrededor de 13 millones de personas participaron, el doble de lo que ella misma esperaba.
“Decían que nadie iba a votar y resultó todo lo contrario”, declaró este lunes en conferencia, al calificar el proceso como un hecho “inédito y democrático”. Según la mandataria, su pronóstico inicial era que votaría un número similar al de la consulta sobre expresidentes realizada en 2021, pero los números superaron esa marca.
Sheinbaum destacó que la elección fue sencilla y con pocos recursos, principalmente impulsada desde redes sociales y algunos eventos en territorio. También se refirió al proceso previo: una convocatoria abierta, revisión de perfiles por parte de juristas y un mecanismo de selección que, según ella, fue transparente.
Al comparar la votación popular con el número de senadores que normalmente deciden sobre los nombramientos judiciales (dos terceras partes del Senado), sostuvo que el nuevo mecanismo es mucho más representativo.
Críticas al Poder Judicial
Durante su mensaje, Sheinbaum volvió a señalar fallas estructurales dentro del Poder Judicial. Mencionó que en lo que va de su administración, 169 personas vinculadas a la delincuencia organizada han obtenido cambios de medida, incluyendo varias liberaciones.
A esto sumó lo que calificó como una “cadena de amparos” para evitar el pago de impuestos, decisiones que bloquean leyes aprobadas por el Legislativo, y un alto nivel de nepotismo. “La mitad del Poder Judicial está formado por familiares: primos, hermanos, cuñados…”, dijo.
También respondió a quienes afirmaron que las campañas para esta elección judicial fueron costosas: “No fue así. Fueron campañas austeras, sobre todo en redes. No se nos debe olvidar que esto pasó por una convocatoria y evaluación seria”.
Sheinbaum cerró su intervención defendiendo el nuevo modelo judicial como una apuesta por democratizar un poder que, dijo, “hasta ahora ha funcionado entre privilegios y complicidades”.
