Un tapete de colores se ha instalado en el patio de Doña Mayra Mariscal Hernández, una de las cocineras tradicionales del municipio de San Juan Bautista Cuicatlán, quien con la ayuda y respaldo de su esposo, Félix Martínez Gómez, se dedican a la siembra, cosecha y preservación del chile chilhuacle.
Explicaron que las altas temperaturas que se han experimentando en los últimos días en Cuicatlán, han sido el clima perfecto para secar el chile por un tiempo de 10 a 15 días, el cual finalmente será comercializado y usado en la cocina.
Con el chilhuacle, se prepara el mole amarillo, negro y el chile caldo un platillo endémico del municipio, en el cual se experimenta un festín de sabores que van acompañados de la tamala, elote, chilhuacle, especias, carne de puerco y carne de res bien sazonados.
A pesar de ser un elemento primordial para la preparación del mole oaxaqueño, durante los 5 meses de siembra y desarrollo, el cultivo se ve limitado a causa de las plagas como la mosquita blanca y el trips, los cuales comúnmente afectan los cultivos de chile, antes de lograr la cosecha.
Y aunque en Cuicatlán se tiene el clima perfecto para la siembra y cosecha, sólo existen alrededor de 5 productores de chilhuacle, y la familia Martínez Mariscal es una de las que ha podido comercializar, así como mantener la especie, gracias al apoyo de los diferentes entes gastronómicos e instancias federales.