Ciudad de México. – Con el objetivo de brindar a sus derechohabientes opciones para acceder a una vivienda adecuada que garantice su calidad de vida, el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit) ha trabajado de manera conjunta con el Programa de Naciones Unidas para los Asentamientos Humanos (ONU-Habitat) y ha implementado sus criterios en la definición de políticas y programas en materia de vivienda.
Desde el inicio de la presente administración, el Programa Nacional de Vivienda, elaborado por la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), incorporó los siete elementos de la vivienda adecuada establecidos por ONU-Habitat: seguridad de la tenencia; disponibilidad de servicios, instalaciones e infraestructura; asequibilidad; habitabilidad; accesibilidad; ubicación y adecuación cultural.
En este contexto, el Infonavit estableció estrategias con respecto a cada uno de los elementos delimitados por la ONU para lograr que las y los trabajadores, especialmente de los menores ingresos, tuvieran acceso a una la vivienda adecuada.
Con la implementación de las Reglas de Carácter General para el otorgamiento de crédito, que entraron en vigor en mayo de este año y establecen que las casas deben contar en un radio de 2.5 kilómetros con acceso a servicios de salud, educativos y recreativos, el Instituto da prioridad a los criterios de ubicación, accesibilidad y disponibilidad de servicios.
En cuanto a la seguridad de la tenencia, el Instituto implementó una serie de prórrogas, reestructuras, seguros, ajustes de mensualidades, descuentos y convenios, para que los acreditados puedan regularizarse, pagar su casa, tramitar sus escrituras y darle seguridad jurídica a su patrimonio.
El Instituto también ha trabajado en aspectos como la asequibilidad, al crear productos crediticios más baratos y accesibles. Actualmente, las tasas de interés del Infonavit van del 1.9 al 10.45% dependiendo del ingreso del trabajador, además de que se tienen mensualidades fijas durante toda la vida del financiamiento.
En cuanto a la adecuación cultural, el Instituto ha promovido programas de autoconstrucción como ConstruYO y de adquisición de suelo como Crediterreno para que cada trabajador pueda decidir libremente cómo desea construir su casa según sus gustos y necesidades, de acuerdo con el clima y la cultura de su localidad.
Para continuar con el trabajo conjunto, el Infonavit y la ONU firmaron un acuerdo de colaboración para apoyar a los municipios en la elaboración, fortalecimiento y mejora de planes de desarrollo urbano locales con estándares internacionales adaptados al contexto del país que permitan encaminar a las ciudades mexicanas a convertirse en centros urbanos compactos y eficientes.
Dicho acuerdo también permitirá generar información estratégica para establecer una línea base sobre el avance en el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) planteados por la ONU en los municipios mexicanos.